Capitulo 6

Miriam se asoma por la ventana como suele hacer todas las mañanas después de levantarse. Esta mañana el amanecer era mas bonito de lo habitual, sus colores resaltaban mas y te hacían sentir alegría  o eso era como lo percibía ella. El día anterior se lo había pasado genial en el concierto, había gritado como nunca. Ahora estaba un poco ronca, pero le daba igual, solo quería arreglarse para ir con las chicas de nuevo a la cita con One Direction. No entendía por que ahora pensaba en una cita con ellos como si fuera algo normal, todos los días soñaba con eso y cuando tiene una se siente normal, no lo entendía. Decidió que ponerse, se arreglo y cuando iba a salir de casa su madre la llamo.

Madre: -Miriam, ¿a donde vas?

Miriam: -Voy a comer con las chicas.

Madre: -¿A donde?

Miriam: -Al McDonal´s -suspira

Madre: -¡Pero tu estas ronca! ¿a donde quieres ir con esa voz? Te quedas aquí.

Miriam: -Jo mamá... déjame salir.

Madre: -No que te pones mala.

Miriam: -¿Y si voy muy abrigada? Con bufanda.

Madre: -Bueno... vale, ¿necesitas dinero?

Miriam: -No me hace falta.

Madre: -Anda, toma, diez euros -Miriam los coge.

Miriam: -Vale, bueno, me voy.

Madre: -Adiós, cuídate y ten cuidado con lo que haces.

Miriam: -Que si, mamá...

Siempre que sale viene su madre a inspeccionarla, nunca la deja salir sin ir abrigada aunque sea pleno verano. Tiene que ponerse una rebeca o algo, a veces no le deja salir por no cojer abrigo. Miriam quiere ser ya mayor de edad para hacer lo que quiera, ponerse lo que le apetezca y que su madre no la mande a cojer un abrigo.

Muy abrigada sale a la calle y comienza a caminar en dirección al McDonal´s. Después de un rato caminando se encuentra con un amigo de clase, Carlos.

Miriam: -Hola, Carlos -dice saludando con la mano.

Carlos: -¡Miriam! -dice mientras va hacia ella.

Miriam: -¿Que tal estas?

Carlos: -Bien, gracias, ¿que haces por aquí?

Miriam: -Voy de camino al McDonal´s, ¿y tu?

Carlos: -Aqui con unos amigos, ¿y con quien vas?

Miriam: -Con las chicas y One Direction.

Carlos: -Jajaja que graciosa, con One Direction dice... -dice mientras se rie a carcajadas

Miriam: -¡Que es verdad!

Carlos: -No hace falta que me mientas, se que vas solo con las chicas.

Miriam: -¡Que no! Bueno... me voy.

Carlos: -Vale, pregúntales que tal estas de mi parte.

Miriam: -Vale, adiós.

Siguió caminando hasta que al fin llego. "Que raro, no están fuera" pensó ella, le manda un mensaje a Dayana pero no contesta, "¿que habrá pasado?". Entra y empieza a explorar el restaurante, esquina por esquina, hasta que al final los encuentra. Estaban todos sentados hablando; los chicos a un lado y las chicas al otro.

Miriam: -¡Hola, siento el retraso!

Gara: -Hola.

Miriam: -¿Por que no me esperasteis? -dice algo enfadada.

Paula: -Hacia algo de frió fuera y decidimos esperarte aquí.

Miriam: -Ah vale, pero podrían haberme avisado o por lo menos contestado a mis mensajes.

Eva: -¿Que mensaje? No nos ha llegado ninguno.

Miriam: -Pues vaya cobertura que hay... -dice sentándose- ¿Y de que hablabais?

Andrea: -Estábamos comentando el concierto.

Harry: -¿A ti que te pareció?

Miriam: -No hay palabras para definirlo.

Niall: -¿Pero para bien o para mal?

Miriam: -¡Para bien, obviamente!

En ese instante se acerca un camarero uniformado y con cara de cansado. Comienza a preguntarnos lo que quería y tomando nota. Comenzó Niall pidiendo: una hamburguesa con todo, otra hamburguesa pero de pollo, patatas fritas con ketchup y de postre un helado; como normalmente pidió bastante. Luego pidieron el resto de los chicos y después las chicas. Mientras ellas pedían  ellos se fascinaban viéndolas  ninguna gritaba ni hacia nada raro comparado a las otras fans, eran simplemente ellas mismas y eso les encantaba a ellos.

La comida transucuría con tranquilidad, conversaban y reían, excepto Niall que no podía parar de comer, había pedido dos o tres veces. Pero cuando Niall termino de comer, ellos ya se tenían que ir.

Liam: -Bueno, nos tenemos que ir ya...

Dayana: -¿Ya? ¿Tan pronto?

Harry: -Si, tenemos que ensayar.

Gara: -Pues bueno... Adiós -dice mientras se levantaban para irse ellas también.

Niall: -¡Esperen!...

Capitulo 5

Ya se había acabado el concierto, había sido genial. Cantaron muy bien y no pararon de mirar a las chicas o eso es lo que ellas sentían y pensaban. Estaban muy emocionadas y ahora se dirigían a la cafetería donde habían quedado con los chicos. Nunca habían ido a esa cafetería, era muy curiosa, abría solo cuando la gente no estaba en la calle. Era muy antigua, parecía una casa, con tejado rojo y una fachada de piedras. Estaba abierta y era extraña, ellas pensaban que los dueños no sabían que había un concierto. Ya habían llegado y todavía ellos no estaban allí.

Andrea: -Hace frío, ¿nos sentamos dentro?

Eva: -Yo creo que si, es mejor- comento. Seguido a esto entraron.

Dayana: -Aquí se esta bien.

Gara: -¿En que mesa nos ponemos?

Miriam: -En una de once personas, para los chicos.

Gara: -Vale

Paula: -Que raro que no estén aquí, ¿no creéis?

Dayana: -Si, bueno les esperamos...

Las chicas estuvieron hablando mientras esperaban por ellos, pidieron un par de refrescos y algo para picar. Se estaban acabando los temas para hablar y ellos no llegaban. Ya estaban desesperadas, pero no podían hacer mucho, si no armarse de paciencia.

Eva: -Chicas, llevamos una hora aquí y no aparecen.

Andrea: -Yo estoy cansada y mi madre como no llegue pronto a casa me castiga.

Paula: -Y la mía también.

Dayana: -Quizás  Olga estaba en lo cierto...

Gara: -Bueno, vamos a pagar y nos vamos.

Estaban muy cansadas y decepcionadas, lo que había dicho Zayn era mentira, no estaban allí. Tenían muchas ganas de llorar, aislarse de todo el mundo y dormir. Pensar en todo lo que había pasado, escuchar sus canciones y desconectar. No podían con sus almas. Se lo habían creído como unas tontas. Estaban hablando de lo sucedido fuera de la cafetería, pero les interrumpió una voz que ya habían escuchado antes, era Zayn. Estaban sorprendidas que salieron corriendo hacia ellos.

Zayn: -Lo sentimos muchisimo por llegar tarde.

Eva: -No pasa nada.

Andrea: -Lo importante es que estáis aquí.

Harry: -Lo sentimos, en serio, el manager no nos dejaba salir.

Dayana: -Vaya manager, casi no les deja respirar.

Liam: -Bueno, ¿entramos?

Miriam: -No podemos...

Niall: -¿Por que?

Gara: -Tenemos que ir a casa, si no, nuestras madres nos castigan.

Louis: -No pasa nada, si no, voy yo a vuestras casas a pedir disculpas, o si nos escapamos...

Paula: -¡Que malote...!- dijo mientras todos se reían.

Andrea: -Me parece buena idea Louis, pero no conoces a nuestras madres.

Eva: -Y que lo digas... Nos dejaron ir al concierto de milagros.

Harry: -Bueno, podemos quedar otro día, ¿no?

Gara: -Si, claro.

Niall: -¿Que tal si vamos a comer?

Miriam: -Depende de cuando sea...

Zayn: -Mañana a la una.

Dayana: -¿Y a donde vamos a ir?

Harry: -No se... ¿Que tal al McDonal's?

Andrea: -Vale.

Eva: -Pues nos vemos mañana a la una en el McDonal's.

Liam: -Vale, tranquilas no llegaremos tarde.

Gara: -Bueno, no vamos- dijo mientras se despedían.

Niall: -Adiós.

A las chicas les había cambiado la cara y los pensamientos. Ahora estaban muy felices y contentas, solo pensaban en la comida del día siguiente y todo lo que tenia que ver con ellos. Era demasiado tarde, casi no se veían las unas a otras y las farolas estaban a punto de encenderse, las chicas cogieron el autobús. Cada una llego a su respectiva casa, se pusieron el pijama y se acostaron. El día siguiente iba a marcarles la vida y a ser inolvidable.

Capitulo 4

Tanto tiempo soñando con ellos, viendo sus videos, hablando con sus posters y cantando sus canciones. Y están allí. Cerca de ellas, cada vez mas y mas cerca. Se habían dado cuenta de que eran fans, que llevaban unos preciosos vestidos y son guapas, querían conocerlas. Pero ellas no se movían así que decidieron empezar ellos. Se iban acercando disimuladamente, pero ellas se dieron cuenta. A penas quedaban diez metros para estar cerca de las chicas. Siguieron caminando hasta que uno de ellos choco con Gara, era 

Niall.

Niall: -UPS! Perdón.

Gara: -No pasa nada.- dijo mientras se sonrojaba.

Los chicos sienten que las chicas están nerviosas, muy nerviosas. Temblaban y se sonrojaban, les salían unas sonrisas tontas muy bonitas. Pero ellos también lo estaban. Habían visto muchísimas fans, pero ninguna como ellas. Tenían el corazón a mil por hora. Había un silencio algo incomodo, a si que Harry decidió romperlo.

Harry: -Hola, ¿sois fans?

Eva: -Si – respondió.

Liam: -¿Desde cuándo?

Miriam: -Desde que salisteis de “Factor X”.

Louis: -De eso hace un montón, casi dos años, ¿os acordáis cuando bailamos con los pokemons?

Zayn: -Jajaja si- dijo mientras Louis y Harry comenzaban a bailar.

Niall. –Creo que “Factor X” es lo mejor que me ha pasado en la vida.

Harry: -¿Y que hacéis aquí?

Dayana: -Esperar a que sea la hora del concierto.

Liam: -Pues va a empezar dentro de un rato, aunque todavía tenemos que preparar los instrumentos.

Andrea: -Bueno, como estamos en primera fila y son enumeradas, no pasa nada. Nadie nos va a quitar los asientos.

Paula: -Sabiendo cómo es la gente aquí, no sé yo… te pueden robar hasta un chicle.

Niall: -¿En serio? ¿Te robaron un chicle?

Paula: -Jajaja si, en el instituto, pero fue porque un día cogí yo uno- dijo mientras miraba a las chicas.

Gara: -No me mires, que no fui yo.

Paula: -Ya… quien fue lo sabe.

Louis: -¿Sois de aquí?

Miriam: -Quedan quince minutos para que empiece, nos tenemos que ir.

Dayana: -Adiós.

Zayn: -¡Esperen!- dijo mientras agarraba a una por el brazo.

Andrea: -Chicas, esperad, nos va a decir algo.

Paula: -Venga, que nos tenemos que poner en la cola.

Zayn: -Cuando termine el concierto esperadnos enfrente de la cafetería, por favor- dijo mientras señalaba el lugar exacto.

Eva: -Vale, adiós- dijo mientras corrían hacia la otra parte de la plaza.

Liam: -Tío, ¿Por qué les dijiste eso?- añadió cuando vio que las chicas estaban lo suficientemente lejos para no escucharlos.

Harry: -¡Eso!

Zayn. -¿Pero que más les da?, lo dije porque eran simpáticas.

Louis: -Y son las primeras fans que cuando nos ven no lloran ni gritan.

Niall: -Zayn hizo bien, es verdad.

Zayn: -Gracias.

Liam: -Chicos, hay que ir entrando o estamos perdidos.

Comenzaron a reírse mientras caminaban hacia la puerta trasera que daba con los camerinos. Se cambiaron y se prepararon para salir al escenario.

Mientras, las chicas estaban nerviosas: acababan de hablar con One Direction y encima les habían dicho que les esperaran en la cafetería de enfrente.

Andrea: -Todavía no me lo creo, pellizcadme a ver si no estoy soñando.

Eva: -Vale- dijo antes de pellizcarla.

Andrea: -¡Ahh! Bestia, ahora me saldrá un morado.

Eva: -Tu dijiste que te pellizcara.

Andrea: -Ya- dijo u la miro con cara de asesina.

Miriam: -¿Para que creéis que nos dijeron que les esperáramos?

Gara: -No sé, pero con tal de estar con ellos de nuevo me da igual.

Dayana. –Si, hay que entrar ya, venga.

Paula: -Yo no puedo parar de pensar en ellos… vale, vamos.

Ya se estaba acabando el concierto, habían cantado todas las canciones de su nuevo álbum, “Take Me Home”. Comenzaron con las más movidas, luego con las lentas y para terminar habían pensado en cantar alguna de su otro disco, “Up All Night”.

Ellas no podían parar de pensar en lo que pasaría después del concierto. Se preguntaban muchas cosas como: ¿para que las querían ver de nuevo? ¿Y por qué se fijaron en ellas?, eran unas simples fans. Ahora solo querían que acabara el concierto y verlos de nuevo, claro, si iban a donde habían quedado, porque quien sabe, a lo mejor no iban.

Capitulo 3

Paula, Andrea y Gara ya habían llegado a la plaza donde habían quedado con las demás. Como habitualmente no llegaban puntuales, eran las ocho y diez y no habían dado señales de vida.

Paula: -Andrea, mándale un mensaje a Dayana, a ver donde está.

Andrea: -Vale, hecho.

Gara: -¿Dónde se habrán metido?- dijo preguntándose a sí misma.

En ese mismo instante salieron de una esquina Dayana, Miriam y Eva. Corriendo se acercaron a las otras chicas.

Miriam: -Lo siento chicas.

Gara: -¿Dónde estaban?

Eva: -Se retraso el autobús y tuvimos que venir caminando.

Dayana: -Casi no llegamos a tiempo.

Paula: -¡Wow, estáis guapísimas!- dijo mientras se saludaban con dos besos.

La verdad es que aquellos vestido que les había costado mucho dinero eran precioso. Miriam llevaba uno azul muy parecido al de Paula, pero menos apompado. El de Eva era amarillo pastel, con bolsillos y muy suelto. Y por último el vestido de Dayana que era rojo vivo, pegadito con un cinturón negro precioso.

Mientras las chicas comentaban sobre sus vestidos Andrea se acordó de las entradas y les pregunto si las habían llevado.

Andrea: -¿Trajeron las entradas?

Miriam: -No sé, creo que si, déjame mirar en el bolso.

Dayana: -Yo creo que si la tengo.

Paula: -Solo digo que sin entrada no podéis entrar

Eva: -Yo la tengo en el bolsillo

Dayana: -Yo también, está aquí.

Miriam está desesperada el bolso es demasiado grande y tiene muchas cosas. Siempre le pasa lo mismo, 

tenía que comprarse otro bolso o cambiarlo.

Miriam: -No la encuentro.

Gara: -¡Ay mi madre!

Miriam: -Ayúdenme a buscarla, por favor.

Eva: -Vale.

Miriam: -Jope, como la haya perdido…

Dayana: -Tranquilízate, la encontraremos.

Miriam: -¿Cómo quieres que me tranquilice, si he buscado varias veces y no la encuentro?

Paula: -Relájate, vamos a quitar todo del bolso, seguro que la encontramos.

Miriam: -Vale- dijo mientras empezó a sacar utensilios.

Gara: -Dios, ni más cosas tienes aquí dentro.

Andrea: -Si, tiene: un cuaderno, un boli, un espejo, rímel, un pintalabios…

Paula: -Podría hacer un rastrillo aquí mismo.

Miriam: -Ay que graciosa- dijo irónicamente.

Eva: -Silencio y ayuden.

Gara. –Vale.

Miriam: -¿Ves? No está.

Dayana: -Espera, aquí hay algo, está aquí.

Andrea: -Menos mal que tenemos a Dayana.

Paula: -Es como “Ratreator”- dijo con la voz que ponen en el anuncio.

Dayana: -¡Oye…!- dijo mientras que las otras se reían.

Paula: -Es una broma.

Dayana: -Eso espero.

Eva: -Chicas, ¿no se han preguntado por qué hay tan poca gente?

Andrea: -La verdad es que si.

Miriam: -A lo mejor el concierto es detrás de la plaza.

Paula: -Déjame ver la entrada- dijo mientras la sacaba- aquí dice que es el la parte trasera, como dijiste.

Gara: -Bueno, ¿Qué hacemos?, ¿nos quedamos aquí hasta que sea la hora o nos vamos ya a la parte trasera?

Dayana: -Yo creo que es mejor quedarnos, ¿ustedes que piensan?

Eva: -Yo pienso lo mismo.

Miriam: -A mi me da igual.

Gara: -Entonces, ¿nos quedamos?

Andrea: -Por mi sí.

Paula: -Y por mí.

Gara: -Vale, nos quedamos.

Miriam: -Tengo una sensación muy rara.

Dayana: -¿Cómo que rara?

Miriam: -No sé cómo explicarlo, el corazón me va súper rápido y siento un poco de miedo.

Eva: -Bueno, tranquila, seguro que no es nada.

Miriam: -Si, supongo que se me pasara.

Andrea: -¿Y qué tal te salió el examen de lengua, Miri?

Miriam: -Bien, no era muy complicado.

Mientras aquellas chicas seguían hablando sobre sus preocupaciones Miriam no era la única que tenía una sensación extraña. Paula sentía una presencia, pero le daba miedo mirar hacia atrás o investigarlo. Pensaba que a lo mejor era un vagabundo o algún drogadicto. Tomo aire y decidió mirar a ver  si había alguien. Antes se lo había comentado en susurros a Miriam y la convenció para que giraran juntas. Se dieron la vuelta, y así era, había cinco chicos cerca de ellas, muy cerca. Se giraron de nuevo y tartamudeando se lo comentaron a sus amigas.

Paula: -Chi…chi…chicas.

Gara: -¿Qué ocurre?

Miriam: -Mi…mi…miren- fijo mientras señalaba disimuladamente a los chicos.

Todas se giraron y se quedaron mirándolos con una sonrisa tonta, de esas que salían solas. Todavía no se lo podía creer. ¡Era One Direction!

¿Ahora que pasara? ¿Se acercarían a ellos? ¿O ellos lo harían? A lo mejor pasarían, eran solo seis simples fans, eran como las demás. Pero ellas no perderían la esperanza, a lo mejor las saludaban y hablaban con ellas. Ninguna sabía el futuro.

Capitulo 2

Gara mira al reloj, ya son las siete y queda poco para la hora en la que quedaron todas. Ella está en casa de Paula, con Andrea. Habían quedado para prepararse para el concierto. Estaba preocupada porque ninguna salvo ella estaba vestida. Gara llevaba un precioso vestido violeta de palabra de honor, por la parte de arriba tenia purpurina y luego un cinturón azul marino. Por debajo era suelto y corto por la rodilla, además llevaba unas francesitas negras. Estaba algo indecisa, porque no sabía con que chaqueta lo iba a combinar: ¿con la azul marina o con la negra?

Gara: -¡Chicas! ¡Son las siete y no estáis vestidas!

Paula: -¡Desesperada!

Gara: -Ya son las siete y diez.

Andrea. -¡Gara! Cállate, que nos vamos a cambiar.

Gara: -Vale, mientras, yo me voy pintando.

Mientras Paula y Andrea se cambiaban en otra habitación, Gara estaba sola en el cuarto de Paula. Se puso a mirar los posters y cuadros que colgaban de la pared. Siguió mirando, y se dio cuenta de que había una estantería llena de peluches de todo tipo, pero sobre todo de Disney. A Gara le encantaba Disney, le recuerda a Liam, uno de los componentes de su banda favorita. Entonces salió corriendo hacia la estantería para cogerlos y hablar con ellos.

Gara: -¡Hola Mickey! ¿Qué tal? ¿Bien? Me alegro ¿Yo? Bien, bien…

En ese mismo instante entro Andrea, se quedo mirando a Gara durante un rato y se comenzó a reír fuertemente. Gara se sorprendió mucho al ver a su amiga en la puerta.

Andrea: -¿Qué haces Gara?

Gara: -Nada, nada- dijo mientras sus pómulos enrojecían.

Andrea: -Estabas hablando con un peluche- dijo entre carcajadas- bueno, yo venía a buscar mi mochila, ya me voy, puedes seguir hablando con Mickey.

Gara: -Adiós, y no  voy a hablar con Mickey.

Andrea: -Vale, si tu lo dices- dijo cerrando la puerta.

Gara: -¿A que no Mickey?

Andrea: -¡Te escuche!- dijo gritando.

Gara dejo el peluche en su sitio, abrió su mochila, saco el neceser y comenzó a pintarse.

*10 minutos después*

Gara: -Chicas, ya termine de pintarme, ¿Dónde estáis?

Paula: -¡Aquí!

Gara: -¿Dónde es aquí?

Paula: - En el cuarto que está enfrente del baño.

Gara: -¿Y dónde está el baño?

Paula: -Uff, ¡ya voy yo!

Paula cierra la puerta de la habitación, y deja a Andrea dentro, que todavía no estaba vestida. A ella solo le falta ponerse los tacones y arreglarse. Y sale corriendo en busca de Gara.

Gara: -¡Wow! Qué bonito el vestido, me encanta, te queda genial.

El vestido es rosa, la parte de arriba de una sola asilla y con purpurina. Debajo había un cinturón de un rosa más flojo y la parte de abajo terminaba con un rosa más fuerte, en forma de campana, parecido al de Gara pero más apompado.

Paula: -Gracias, pero yo pienso que no me queda muy bien, todavía me queda arreglarme.

Gara: -No piense eso. Te queda súper bien.

Paula: -Bueno… ¿te apetece un vaso de agua?

Gara: -Si, por favor.

Paula: -Pues acompáñame.

Gara y Paula fueron hacia la cocina y justo antes de entrar escucharon a su amiga Andrea gritar. Se asustaron y fueron a ver lo que le ocurría. Gara iba delante, mientras Paula la guiaba. Al llegar se estrompó con la puerta y comenzaron a reírse.

Paula: -¿Estas bien?- dijo riéndose

Gara: -Si, ¡ay!

Abrieron la puerta y encontraron a Andrea mirando al móvil, sin vestirse todavía.

Gara: -¡¿Por qué gritaste?!

Andrea: -Nada, que vi una foto preciosa de Harry.

Paula: -Ah, menos mal, ¿quieres agua?

Andrea: -Vale, gracias.

*20 minutos después*

Las chicas ya habían terminado de vestirse y de arreglarse. Andrea llevaba un vestido de color azul celeste suelto, un cinto marrón flojo y mangas cortas con volantes. Lo combinaba con unas pulseras y un collar de colores plata. Los tacones eran del mismo color que el cinto. Paula también llevaba tacones, aunque eran de color rosa chicle. Las tres se habían maquillado poco, era un maquillaje simple: raya, rímel base y brillo o pintalabios.

Cogieron las entradas de la habitación de Paula y se dirigieron a la puerta. Se despidieron de la madre de su amiga y salieron. Habían salido justas de tiempo. Eran las ocho menos cuarto y habían quedado a las en punto. Salieron del edificio y se dirigieron tranquilamente a la plaza donde habían quedado.

Esas chicas tenían una pequeña sensación de que esa noche iba a ser inolvidable e iba a cambiar sus vidas para siempre.

Capitulo 1

Era un día como otro cualquiera, pero para Paula y sus amigas no. Tenia muchas amigas, pero entre ellas, cinco destacaban, por tener el mismo grupo musical favorito. Cada una de ellas distintas pero todas iguales a la vez. Eran: Miriam, Dayana, Gara, Eva y Andrea. Estaban en su colegio, vestían sus uniformes, una falda oscura, con un polo blanco y un suéter también azul marino. Tenían mucho claro, y es que iba a empezar el verano, era viernes y se encontraban en el recreo.

Miriam: -Estoy súper nerviosa.-dijo gritando

Dayana: -Y yo, solo quiero que llegue esta noche.

En ese mismo instante llego una amiga de ellas y compañeras de clase, no era como ellas, tenía el pelo lacio de color dorado, con unos ojos muy bonitos de diferentes tonos de verdes y marrones. Llevaba el mismo uniforme que ellas y sin duda era mu simpática. Se llamaba Olga.

Olga: - Hola chicas, ¿Qué pasa esta noche?

Andrea: -Esta noche será una gran noche.

Gara: -Si, es el concierto de nuestra banda favorita.

Eva: -De One Direction!

Olga: -Que raro que ustedes estén hablando o pensando en One Direction…

Paula: -La verdad es que si.

Olga llevaba muchísimo tiempo escuchando hablar a esas chicas sobre su banda favorita, pero nunca le había atraído, había escuchado algunas de sus canciones pero no le gustaba. Ella prefería otros cantantes como Selena Gómez o Taylor Swift.

Olga: -¿Y a qué hora es?

Miriam: -Es a las nueve, pero nosotras iremos una hora antes para no coger cola.

Olga: -¿Son enumeradas?

Eva: -Si

Olga: -Entonces, ¿para qué van antes?

Paula: -Porque a lo mejor los vemos y los conocemos.

Olga: -Tienen demasiados sueños, hay muy pocas probabilidades de que los conozcan, por no decir ninguna.

Andrea: -Los sueños se hacen realidad

Olga: -Eso no lo creo…

En ese momento toco la campana que anunciaba el fin del recreo, se despidieron de Miriam, que era la única de las amigas que no estaba en la misma clase. Estaban algo nerviosas por el concierto, pero lo que no sabían era que esa noche iba a ser inolvidable. Iba a empezar algo que les cambiaria la vida por completo. Ya no volverían a ser simples estudiantes si no algo más.